viernes, 7 de septiembre de 2012

CONFLICTOS ETICOS Y MORALES DE LA PRACTICA MEDICA Y LA BIOETICA

HISTORIA Y PRINCIPIOS DE LA BIOETICA


"Despues de un tiempo uno aprende la sutil diferencia entre sostener una mano y encadenar un  alma, y uno aprende que el amor no significa acostarse y una compañia no significa srguridad y uno empieza a aprender. Que los besos no son contratos y los regalos no son promesas y uno empieza a aceptar sus derrotas con la cabeza alta y los ojos abiertos y uno aprende a construir todos sus caminos en el hoy, por que el terreno de mañana es demasiado indeseguro para sus planes y los futuros tienen una forma de caerse en la mitad. Y despues de un tiempo uno aprende que si es demasiado, hasta el calorcito del sol quema. Asi que uno planta su propio jardin y decora su propia alma, en lugar de esperar a que alguien le traiga flores. Y uno aprende que realmente puede aguantar, que uno realmente es fuerte, que uno realmente vale, y uno aprende y aprende... y con cada dia uno aprende.(Anonimo. Y uno aprende)
 
"Quiza, sin saberlo, la voz de Dostoievsky: todos somos reponsables de todos, y yo mas que los otros, deba repensarse cuando de etica, medicos y pacientes se habla". (Kraus, Arnoldo. "La bioetica como pregunta")

Se preguntaran que relacion hay entre el porma anterior, la cita de Kraus y este tema. El poema trata de la vida, de la reponsabilidad, la dignidad, el amor, el futuro, el cuerpo y el alma. En fin, trata de que la vida es mas que un cumulo de elementos racionales y materiales, que nuestra postura hacia ella no se puede no se puede reducir a conservarla y prolongarla. Pues bien, todo esto es objeto de reflexion de la bioetica.
 
La bioética es una disciplina de reciente aparición que estudia los aspectos éticos de las relaciones entre la biología, la medicina, la filosofía, la cibernética, la política, el derecho y la teología. Todo indica que la palabra bioética fue usada por primera vez en 1971 por van Rensselaer Potter, en su libro bioethics: bridge to the future (bioética: puente hacia el futuro). En este libro el autor vincula, la biología con la ética, de donde surge Bio-Etica. Posteriormente, Andre Hellegers fundo, en 1972, el instituto Kennedy de bioética en la universidad de Georgetown, Washington, D.C.
Un cambio importante, que dio pie a la aparición de la bioética, es la transformación de la medicina tradicional que se ha convertido en uno de os terrenos donde se suscitan las polémicas más acaloradas, pues finalmente aquí se tratan asuntos de vida o muerte, de calidad de vida, de dignidad humana o de discriminación racial.
Para comprender el avance de los nuevos aportes de la medicina, se requiere un esfuerzo. Sitúate por un momento en una época donde no se hacían trasplantes de órganos y alguien de tu familia estuviera condenado a muerte a causa de una enfermedad del corazón. Si en ese momento te hubieran hablado de la posibilidad de “poner” el corazón de otra persona, lo  más seguro es que no lo creyeras.

Principios de la bioética

Un instrumento clave en la palabra bioética es el “convenio para la protección de los derechos humanos y de la dignidad del ser humano con respecto a las aplicaciones de la biología y de la medicina. Convenio de los derechos humanos y de la biomedicina”.
En la declaración universal sobre el genoma humano y los derechos humanos, de la UNESCO, aprobada el 11 de noviembre de 1997, se resumen los fundamentos, principios y procedimientos de la bioética. Esta declaración surge de la necesidad de recoger información y formular criterios consensuados, con carácter internacional, para contar con una especie de metalegislacion que rebase el ámbito de las figuras jurídicas particulares de cada país en torno a la bioética y temas relacionados.
Los siguientes principios de la bioética sirven para orientar la práctica médica o analizar, desde una perspectiva ética, la reglamentación sobre salud pública, los fines de la medicina y otros temas.
No maleficencia: este principio obliga a no hacer daños deliberadamente, respetar la vida física, la dignidad, los derechos humanos y a la persona como ser social. De el surgen reglas como no mataras, no causaras sufrimiento ni dolor, no incapacitaras, no ofenderás. Incluye evitar la negligencia por falta de información o descuido. Se formula en términos negativos, esto es, lo que no se debe hacer.
 
Beneficencia: este principio se enuncia en forma positiva y señala la obligación de realizar acciones en favor de los demás. Incluye hacer el mayor bien posible y reducir el daño al mínimo para el paciente, así como hacer los esfuerzos necesarios para asegurar su bienestar.
Autonomía: señala la obligación de respetar a las personas como agentes capaces de tomar decisiones por si mismos y deliberar sobre sus fines. Los enfermos tienen el derecho de estar informados de su posible curación, los riesgos o efectos secundarios que supone someterse a una operación, rehabilitación o tratamiento para que puedan tomar sus decisiones. Cuando la persona no está en condiciones de decidir por ella misma, debe ser protegida.
Justicia distributiva: significa equidad en la distribución de beneficios y obligaciones. Pero la equidad supone protección para los más desprotegidos. También implica que no se debe discriminar a ningún enfermo. Igualmente sé a quién debe pagar el costo de la investigación científica y quien debe recibir sus beneficios.


LA TECNOLOGIA MEDICA Y SUS IMPLICACIONES ETICAS


La ciencia puede rebasar pro muchas razones el concepto actual de lo que significa el ser humano, de lo que deberia ser la etica de la medicina, de lo que son los limites de la vida y de lo que se entiende por calidad de vida.

Avances de la tecnología medica

¿Qué es la tecnología médica? Esta es la primera pregunta que debemos responder. En un sentido muy laxo, se puede decir que la tecnología médica es tan antigua como la primera aplicación de un método curativo. El primer registro histórico al respecto corresponde al médico y arquitecto egipcio Imhotep, quien en el año 2600a.C. escribió textos sobre el diagnóstico y tratamiento de 200 enfermedades.


En la época contemporánea, por tecnología médica se entiende la aplicación del conocimiento científico y la tecnología en la medicina; incluye la práctica científica que se lleva a cabo en laboratorios clínicos.  Los científicos que desempeñan este trabajo forman parte del equipo médico que determina la presencia o ausencia de enfermedades, así como su gravedad.
En suma, las tecnologías médicas tienen el propósito de mejorar el sistema de salud en todos los niveles, esto es, en la prevención, diagnóstico y curación de enfermedades. Sin embargo, aún hay problemas por resolver. Unos relacionados con los límites del desarrollo de la tecnología médica; otros, con los principios de la bioética, por ejemplo, en qué casos resulta un peligro respetar la autonomía del paciente, o bien como evitar injusticias en la distribución de medicamentos y aplicación de ciertos instrumentos o técnicas en el tratamiento, que presupuesto asignar a la investigación y muchos más. Abordaremos algunos de estos problemas a continuación.

Reproducción asistida.



Si solo existieran criterios científicos, todo avance médico, cualquier innovación tecnológica, que satisficiera las necesidades de un individuo sería aceptable sin cuestionamiento. Si así fuera, la bioética no existiría. Pero tomemos el caso que analiza Arnoldo Kraus, para poner en duda esa forma de proceder y poder terminar si la inclusión de la ética es indispensable.
“hace algunos años la prensa informo que Adriana Iliescu había parido a los 67 años. Iliescu quería a toda costa ser madre por lo que solicito que se le aplicasen técnicas de reproducción asistida, las cuales fueron exitosas. Sometida a cesárea concibió dos bebes, de los cuales sobrevivió una niña de 1.4 kg; el hermano gemelo falleció antes de nacer”
El anterior es un ejemplo de reproducción asistida, la cual consiste en una serie de técnicas avanzadas para ayudar a la fertilidad. Algunas de estas técnicas son la inseminación artificial, la fecundación in vitro, la transferencia intratubaria de gametos, la microinyecion espermática y la inducción de la ovulación. Y aquí aparece la cuestión de los límites: ¿es ilícito aplicar las técnicas de reproducción asistida a cualquier persona que desee concebir un hijo, sin importar la edad de la madreo las probables condiciones en que vivirá el niño? ¿Debe haber normatividad para la reproducción asistida? ¿Basta el deseo y el dinero del paciente para que se le apliquen esas técnicas?
En México existe una iniciativa d ley, presentada por un grupo de legisladores, que propone, entre otros temas, que la reproducción asistida se restrinja en parejas legalmente casadas. Hasta el momento cada hospital o grupo de médicos establece sus propios criterios, por lo que ellos mismos están pidiendo una normatividad para “regular los procedimientos, no solo desde un punto de vista médico y tecnológico sino también moral”.
La iniciativa de ley da pie a formular los posibles problemas: ¿A quién se le negaría la reproducción asistida? ¿A las lesbianas, a las pobres, a las solteras, a las mujeres de edad avanzada? ¿Cuáles serían los criterios éticos, jurídicos, y médicos para manipular gametos, cigotos y embriones?

Como se puede sospechar, al plantear preguntas de este tipo, es posible que la reproducción asistida se acerque a la reproducción selectiva.
El problema ético y moral que se presenta en la actualidad respecto a la reproducción asistida nos en tanto médico, como una cuestión social sobre el tipo de parejas que deben tener acceso al servicio. Muchos grupos sociales condenan al homosexualismo y, por consiguiente, el derecho de procrear para los homosexuales. Se trata de una condena moral. La ética reflexiona sobre los argumentos morales que se manejan en la sociedad: si el homosexualismo es una práctica histórica, si es contranatural, si es una “desviación” o enfermedad y, por tanto, si es un mal moral tener hijos en esas circunstancias.

Eugenesia

Un sueño constante de la humanidad, albergado sobre todo por las clases aristocráticas, consiste en “mejorar la raza o especie”. Encontramos ejemplos famosos de esta concepción en Platón y las practicas espartanas, que hoy causan horror. La simple locución de la palabra eugenesia provoca reacciones adversas, debido en gran medida a la inmediata relación que se establece con la investigación médica nazi efectuada durante la segunda guerra mundial.

 
La eugenesia es la filosofía social que tiene por objetivo mejorar la herencia humana mediante la intervención social. Se trata de crear seres más inteligentes, más fuertes y reducir el sufrimiento humano, así como los problemas sociales. Los medios para lograrlo son el control natal, la reproducción selectiva y la ingeniería genética.
La reprogenetica es una nueva ciencia que vincula la reproducción asistida con la genética para que los padres puedan escoger las características de sus hijos. Esto permitiría evitar enfermedades hereditarias o congénitas, aunque no sabemos, dic el creador del concepto, Dr. Lee. M. Silver, que cambios sociales acarreara. Sin embargo, uno no puede menos que preguntarse: cuando esto sea posible, ¿se escogerán niños chaparros, morenos, ojos cafés, rasgos fuertes y de mediana inteligencia? Poco probable. Todo parece indicar que la mayoría se inclinara por niños altos, rubios, ojos claros, rasgos finos y muy inteligentes.
Esa tendencia, además de ser indicativa de los patrones de belleza y personalidad predominantes, conduciría a prácticas discriminatorias y racistas o a un eugenismo científico velado, que no debemos permitir; pero el doctor Silver sostiene que la diferencia es que, por lo general, el eugenismo se ha practicado de manera autoritaria, en tanto la reprogenetica sería una práctica voluntaria.
 Entre 1980 y 1999 se creó y funciono el “banco de esperma de genios”, fundado por Robert Clark Graham, al que acudieron donadores como el Premio Nobel William Shockley. 230 niños nacieron utilizando este medio. Sin mencionar la palabra eugenesia y sin el ambiente de horror y violencia nazi, algunos gobiernos tienen practicas eugenésicas.
Ahora bien, si la eugenesia antigua, la de principios del siglo XX y otras de la historia, por la vía coercitiva y con la intervención del gobierno, buscaban el mejoramiento de la especie humana como proyecto social; la moderna, de libre elección y sin intervención del gobierno, tiene por objetivo procrear “bebes de diseño” para que nazcan con las mejores oportunidades, más inteligentes, sin enfermedades congénitas ni discapacidades. Tiene entonces un carácter competitivo, clasista, racista y excluyente, pues ¿Cuántos podrán pagar el costo de un bebe de diseño? ¿es esto eugenesia o algo nuevo?
Los críticos argumentan que se puede vivir con discapacidades, que no hay consenso sobre que es un defecto, que enfermedades antes consideradas congénitas, hoy se sabe que son producto del ambiente. ¿Qué es lo que tenemos en las sociedades actuales? ¿Personas discapacitadas o sociedades discapacitadas, esto es, incapaces de una organización social que erradique la discapacidad y promueva la diferencia cultural?

Trasplante de órganos



¿POR QUE SE TRANSPLANTAN LOS ORGANOS?
Hay enfermedades que hacen que uno o más de los órganos vitales de una persona (riñones, corazón, pulmones, hígado, páncreas o intestinos) dejen de funcionar, es lo que se denomina una insuficiencia terminal del órgano. A menos que se pueda sustituir el órgano, o por lo menos reemplazar su función, la persona afectada muere. En el caso de la insuficiencia terminal de riñón, por ejemplo, el trabajo de los riñones ¾es decir, la eliminación del exceso de agua y productos de desecho del cuerpo¾ puede ser asumido por una técnica denominada diálisis renal. Esta técnica salva la vida de la persona pero requiere mucho tiempo y suele impedir que el paciente en diálisis recupere su plena forma. En el caso de una insuficiencia terminal del intestino, se puede mantener a la persona con vida mediante la alimentación artificial, pero, una vez más, se trata de un sistema complicado que interfiere considerablemente en la vida normal del paciente. En la actualidad no existe ningún sistema artificial satisfactorio que reemplace la función del corazón, los pulmones o el hígado a largo plazo.
El tratamiento preferente para una gran parte de las personas con insuficiencia terminal de órganos importantes, es el trasplante de órganos. Los programas de trasplante de órganos para personas con insuficiencia terminal de los riñones, el corazón, los pulmones o el hígado se vienen realizando desde hace muchos años y hoy tienen un alto índice de éxito. Un número cada vez mayor de trasplantados sigue viviendo veinte años después de la operación, y la mayoría sobrevive por lo menos cinco años. Más recientemente se han venido realizando trasplantes de intestino y de páncreas. También se conocen bien los trasplantes de tejidos como la córnea y el hueso.
En la gran mayoría de operaciones de trasplante se usan los órganos de personas que han muerto. Pero también una persona en buen estado de salud puede donar uno de sus riñones, y en casos poco comunes, se ha dado parte del hígado, pulmón o intestino, sin que ello representara un riesgo inaceptable para la propia salud del donante.
 
¿CUÁL ES LA SITUACIÓN ACTUAL DEL TRASPLANTE DE ÓRGANOS?
Los avances de la Medicina hacen ahora posible la sustitución de varios órganos lesionados. Se han hecho grandes adelantos para solucionar los problemas de trasplante de hígado, páncreas y corazón. En España se realizaron en 1965 los primeros trasplantes de riñón y en 1984 se iniciaron los de corazón e hígado. Por tanto, desde hace algo más de veinte años, el número de personas que viven gracias al trasplante de un órgano vital es cada vez mayor.
 
¿DE DÓNDE SE OBTIENEN ÓRGANOS PARA TRASPLANTE?
De las personas que ceden sus órganos después de morir, para que puedan ser utilizados con este fin.
¿QUÉ ES LA LEY DE TRASPLANTES?
Es la norma jurídica que regula actualmente los trasplantes de órganos.
¿CÓMO SE APLICA ESTA LEY?
Textualmente, la Ley dice: «La extracción de órganos u otras piezas anatómicas de fallecidos podrá realizarse con fines terapéuticos o científicos, en el caso de que éstos no hubieran dejado constancia expresa de su oposición», aunque en la práctica no se realiza ninguna extracción si los familiares de la persona que ha fallecido no lo aprueban.
Los trasplantes de órganos son uno de los exponentes más significativos del progreso científico de la Medicina actual, dadas las técnicas de conservación de vísceras por un lado y el desarrollo de medicamentos inmunosupresores, como la ciclosporina, por otro, que permiten una prolongada sobrevivencia del órgano trasplantado y por tanto del enfermo. Es por ello razonable pensar que la Bioética moderna, debería ser la que canalizara todos los aspectos del trasplante.
Para que se produzca un trasplante debe haber una donación y una recepción. En el acto de la donación se ponen en evidencia las actitudes éticas y culturales de una sociedad, individualizadas en la persona que consiente el trasplante. En la recepción se juntan los deseos del paciente con los aspectos de justicia social de distribución equitativa de órganos.
En los países occidentales como el nuestro, la donación de órganos para trasplantes sucede en un contexto con elevados estándares de justicia social y distributiva:
1.       La asistencia sanitaria es generalmente universal.
2.       La situación de enfermedad, desempleo o invalidez es compensada económicamente.
3.       Las facilidades para el tratamiento antes del trasplante, sobre todo el tratamiento con diálisis en los pacientes con insuficiencia renal terminal, son prácticamente ilimitadas.
4.       Por último las posibilidades de obtención de órganos procedentes de donantes fallecidos son elevadas.
Por ello, principios éticos aceptados en países desarrollados no pueden ser extrapolados a otras áreas geográficas con grandes carencias básicas. En los trasplantes, la atención de estos principios éticos debería ser equilibrada y no se puede atender a uno en detrimento de los otros. Surgen numerosos aspectos relacionados con las áreas del conocimiento y de la práctica donde se hace necesario adoptar decisiones que ayuden a resolver, en muy poco tiempo, situaciones límite para que médicos y coordinadores involucrados en los procedimientos de trasplante no lesionen los principios éticos básicos. En general, los dilemas del trasplante están relacionados con el órgano donado y el receptor del mismo.

Clonación o reconstrucción de órganos a partir de células madre



La palabra clonación, es actualmente un término que hasta los niños más pequeños ya ceuntan con una noción de la misma. Este término empezó a manejarse en 1970, y en los últimos años ha sido bastante popular ya que es incluido en caricaturas, programas y series de televisión, libros, películas y toda clase de medios de entretenimiento y comunicación.
La clonación es el proceso mediante el cual se crea una copia idéntica a una original. Proviene del griego klon, que significa retoño, en 1970 se usó para referirse a la duplicación genética de un humano. Un clon es una célula u organismo pluricelular que es genéticamente idéntico a otro del cual surgió.
La clonación se ha usado para diferentes fines, entre los más destacados encontramos tres:
Clonación con fines terapéuticos. Consiste en usar células embrionarias para clonar células madre, que son células multipotenciales por su capacidad de convertirse en células de cualquier parte del cuerpo. Mientras que una célula madre, es una célula progenitora capaz de dividirse indefinidamente conservando sus propiedades y llegar a producir células especializadas.
NOTA: para este proceso, se requieren investigaciones y tecnologías exhaustivas así como el cultivo, observación y producción de distintos tipos de células.
Clonación con fines de investigación. Se deriva del uso terapéutico, ya que con este se realizan múltiples investigaciones para poder manipular la información genética de la célula madre y obtener todo tipo de tejidos.
Clonación con fines reproductivos. Es una forma de reproducción asexual para obtener una copia casi exacta del individuo clonado.
La clonación presenta un dilema moral, ya que beneficio al desarrollo de los seres humanos y la erradicación de enfermedades genéticas, pero también implica creación, uso y destrucción de embriones clonados, similares a los que se utilizan para reproducir seres humanos. Por eso los especialistas deben tener códigos éticos y morales para manipular todos los ámbitos de estas ciencias

La práctica medica



La práctica médica en la actualidad presenta problemas éticos, algunos antiguos como el arte mismo y otros que se han ido agregando a lo largo del tiempo, por el aumento progresivo en los conocimientos científicos y habilidades técnicas de la medicina, aumentando eficiencia de la atención médica, creando nuevos problemas de ética.
La protección de la salud es uno de los derechos humanos fundamentales (así lo menciona la Constitución, artículo 4°, párrafo 4). Dicho artículo tiene los siguientes propósitos:

·         Lograr el bienestar físico y mental
 
·         Prolongar y mejorar la calidad de vida

·         Crear y extender a toda clase de actitudes solidarias y responsables de la población
 
·         Disfrute de servicios de salud y asistencia social
·         Impulsar los conocimientos técnicos y sociales
 
·         Desarrollar enseñanza e investigación científica para la salud
  El Estado cuenta con el Sistema Nacional de Salud, que tiene por objeto dar cumplimiento al derecho a la protección de la salud, según el artículo 5° de la Ley General de Salud. En su famoso libro Principles of Biomedical Ethics presentan una lista de los principios morales, la mayor parte de los códigos de ética médica contemporáneos:
1) Respeto por la autonomía del paciente
2) Veracidad
3) No hacer daño
4) Hacer el bien
5)   Vigilar que el acceso a las facilidades médicas se haga con toda justicia
6) Confidencialidad
 
El problema de acceso desigual a la atención médica es un problema de ética médica, por lo que interfiere con los objetivos específicos de la medicina:
·         Preservar la salud
 
·         Curar
·         Evitar muertes prematuras e innecesarias
Para finalizar, se da por entendido que se cumplen mejor los objetivos cuando la relación médico: paciente es óptima, es decir cuando se establece en forma oportuna, el medico está capacitado para identificar el problema y manejarlo con eficiencia, y la institución cuenta con los medios para ello.

Suicidio asistido

 
El concepto de suicidio asistido se sitúa a medio camino entre el suicidio y la eutanasia voluntaria, que presuponen la clara voluntad de morir por parte del sujeto.

El suicidio asistido tiene en común con el suicidio normal la circunstancia de que es el propio sujeto el que pone fin a la propia vida, mientras que con la eutanasia voluntaria comparte el hecho de que la muerte ocurre en el contexto de una enfermedad penosa e incurable (o en condiciones que se consideran parecidas, como la ancianidad) y con la intervención de un médico.

El suicidio asistido se caracteriza por los siguientes rasgos concretos: a) la muerte se presenta como una elección del paciente, que, informado sobre su estado patológico irreversible, prefiere no solamente renunciar a terapias inútiles, sino además acelerar un fin que, por otro lado, no se puede evitar; b) el papel del médico tendría que limitarse a proporcionar tanto el medio para matarse (con las oportunas instrucciones) como la asistencia para que la muerte ocurra de manera cierta y sin dolor; c) el motivo que convertiría en legítima y obligada la intervención del médico no sería ya un sentimiento evanescente, como la piedad, sino el deber riguroso de respetar la voluntad y autonomía del paciente.

Para la sensibilidad moderna, el suicidio asistido ofrece una triple ventaja sobre la eutanasia tradicional, es decir: a) la acción letal aparece como una elección libre del paciente; b) la presencia del médico proporciona las adecuadas garantías de una asistencia profesional; pero c) sobre todo, poner fin a la vida se traslada a un plano éticamente menos comprometedor, parecido al de la renuncia a los tratamientos inútiles.

El punto que, de todas maneras, sigue sin resolverse es la cuestión del enfermo incompetente, que no está en situación de expresar su voluntad y, menos todavía, de matarse. Hoy ni siquiera se toma en consideración un procedimiento de eutanasia que dejara aparte a estas personas. Para los partidarios de la eutanasia, la mejor solución para superar este obstáculo está en la difusión del living will o testamento vital, un documento mediante el que cada persona debe indicar expresamente cómo quiere ser tratado en el caso de encontrarse en una situación crítica o terminal.

El concepto de suicidio asistido deja muchos interrogantes abiertos. No es creíble que, como en el caso del aborto, una eventual legislación pueda servir solamente a quienes libremente quieran hacer uso de la misma. Cualquier ciudadano correría el riesgo de “ser suicidado”. ¿Cómo y quién puede distinguir entre una auténtica voluntad de muerte y la depresión, el desconsuelo, el desaliento, etc.? ¿Cómo y quién está en situación de verificar la voluntad real del enfermo incompetente? ¿Cómo impedir que no se convierta en el subterfugio de una engañosa eutanasia involuntaria dirigida a eliminar a los disminuidos?

¿Qué actitud debe adoptar el médico cuando el paciente no puede ingerir la sustancia letal o la acción resulta parcialmente ineficaz? Y también, si la eutanasia se convirtiera en una alternativa “terapéutica” para el enfermo terminal, ¿por qué razón un médico no debería considerarse autorizado a llevarla a cabo en casos extremos incluso prescindiendo de la voluntad del paciente?


Eutanasia

 
A nadie daré veneno, y si alguno me propone semejante cosa, no tomare en consideración la iniciativa de tal sugestión (Hipócrates, juramento)
“¿Es válido provocar la agonía? En este sentido la ética emerge más como un inquisidor que como guía, pues seguramente es más condenable prolongar dolor, denigración y sufrimiento que llevar al doliente a una muerte digna”.
El término eutanasia proviene del griego ευ (eu - buena) y θανατ (thanatos - muerte) y se refería originalmente al acto de poner fin a la vida de otra persona para evitarle la agonía. Su uso ha evolucionado y puede definirse actualmente como el acto, practicado por acción u omisión, que tiene como fin provocar la muerte de un individuo que sufre de una enfermedad incurable que le causa un sufrimiento físico y/o mental intolerable.
Hoy día, el aumento de la esperanza de vida y los avances de la medicina conllevan igualmente un incremento de la importancia de la decisión médica dentro del fallecimiento de una persona. En efecto, la muerte de una persona puede deberse a decisiones médicas que van desde la interrupción del tratamiento médico hasta la inyección de sustancias letales, pasando por la suspensión de la nutrición y la hidratación o la administración de dosis importantes de sedativos que además de aliviar al enfermo aceleran su muerte. Estos distintos escenarios dan lugar a diversas clasificaciones de la eutanasia en función de distintos criterios.
La historia de la eutanasia no es reciente. Aunque el término fue acuñado por el filósofo inglés Francis Bacon a principios del siglo XVII, la eutanasia ha sido un problema persistente de la humanidad que surge naturalmente ante cualquier enfermo grave. Sin embargo, ha sido abordado desde perspectivas muy variadas según la época y la sociedad.
El debate sobre la eutanasia abarca una gran variedad de argumentos médicos o jurídicos a favor o en contra y aviva todo tipo de consideraciones éticas ante las cuales la opinión pública se divide y se generan verdaderas batallas políticas.
Como consecuencia de esto, dentro del panorama legal y jurídico de la eutanasia, esta práctica sigue considerándose ilegal en gran parte del mundo aunque algunos estados la han legalizado o despenalizado con algunas condiciones, casos entre los que se encuentra Colombia.

 

Interrupción del embarazo



El aborto inducido (del latín abortus o aborsus, de aborior, ‘contrario a orior’, ‘contrario a nacer’) o interrupción voluntaria del embarazo (IVE) consiste en provocar la interrupción del desarrollo vital del embrión o feto para su posterior eliminación, con o sin asistencia médica, y en cualquier circunstancia social o legal. Se distingue del aborto espontáneo, ya que este se presenta de manera natural o provocado por algún accidente.
La historia del aborto indica que la interrupción voluntaria del embarazo ha sido una práctica habitual desde hace milenios.[ En el debate sobre el aborto existen controversias de muy distinto carácter: científicas, sanitarias, socioeconómicas, éticas y religiosas que, en parte, se recogen en los distintos ordenamientos jurídicos sobre el aborto en cada país, donde la práctica del aborto inducido puede ser considerado un derecho o un delito.
Cifras sobre el aborto
Los adolescentes, cuando empiezan a la edad de 14 a 16 años, tienen su desarrollo sexual completado. Los jóvenes, teniendo impulsos sexuales, tienden a correr riesgos, tales como los embarazos de muchachas en temprana adolescencia. Esto, al igual en otros casos, tiende a tener cifras altas de abortos inducidos. En un estudio publicado en 2007, se estima que en el mundo se realizan entre 42 y 46 millones de abortos anuales (entre el 20 y el 22% de los 210 millones de embarazos que se producen en el mundo al año) lo que representa, para quienes consideran al embrión como vida humana, la principal causa de mortandad en la especie. De los 190 países del mundo, solo en 22% de ellos está permitido el aborto.[
Respecto a los abortos inseguros, habría habido en el año 2008 unos 21,6 millones a nivel mundial, según un estudio publicado por la Organización Mundial de la Salud en 2011. Según dicha organización, un aborto inseguro es «un procedimiento para terminar un embarazo no deseado llevado a cabo por personas carentes de las habilidades necesarias o en un ambiente que no conforma los estándares médicos mínimos, o ambos».es decir, abortos en los que la vida de la mujer está en peligro. En América Latina y en el Caribe, en 2000, se realizaron 29 abortos inseguros por cada 1000 mujeres de entre 13 y 44 años de edad, más del doble del promedio mundial de 14 abortos por cada 1000 mujeres y 32 abortos por cada 1000 nacimientos. Se estima que el aborto inseguro constituye la tercera entre las causas directas (13%), después de las hemorragias (25%) y las infecciones (15%) de las 536.000 muertes maternas que se producen cada año en el mundo, aunque en América Latina la fracción de muertes maternas debidas al aborto inseguro alcanza el 17%.En América Latina y en el Caribe, de los 18 millones de embarazos que se producen cada año, 52% no son planeados y el 21% de ellos terminan en un aborto. Según algunos estudios, en América Latina se practicarían anualmente unos 3,7 millones de abortos inseguros. El riesgo de muerte a causa del aborto inseguro en los países en desarrollo es de 370 por cada 100.000 casos. El número de mujeres que mueren a causa del aborto anualmente es 68.000, lo que equivale al 13% de la mortalidad materna. En América Latina, el aborto inseguro es responsable del 17 % de las muertes maternas. En un perfil demográfico hecho en Cuba, se menciona como en los años ’60 una madre tenía una variación de 4.7 hijos hasta en el ’92 en el cual entonces se variaba en 1.5 hijos. Esto es debido a los anticonceptivos y los abortos inducidos. Se dice que el aborto inducido redujo el 60% de las muertes maternas, entre años de 1970 al 1990.
Mi opinion sobre estos temas tratados anteriormente es que mientras la tecnologia medica se aplique de una buena manera y sin afectar a la sociedad, es decir que va a servir para que las nuevas generaciones sean mas inteligentes y menos propensas a enfermedades y que sean mas capaces de sobresalir para que el planeta tierras sea un mejor lugar para vivir.

Mi propuesta de solucion es que el gobierno se involucre de lleno en este tipo de actividades para que las regule y aplique leyes a modo de que estas actividades sean para todas las personas y no solo para gente con dinero.
 
Autor: Adolfo Isai Reyes duran
 
Bibliografia:
  • libro de etica y valores II, Yolanda Angulo Parra, editorioal santillana Bachillerato